Si te has enamorado a primera vista de un perro o un gato y éste ha sido maltratado y no sabes qué hacer, no te preocupes. Todo es más sencillo de lo que parece. Vamos a darte algunos consejos de cuidados tras adoptar a un animal maltratado.
Lo que tienes que tener muy presente siempre es que el animal maltratado debe tratarse de manera especial, dándole grandes dosis de cariño y teniendo mucha, mucha paciencia, hasta que se encuentre cómodo y seguro a tu lado. Tarde lo que tarde, no te pongas fecha límite.
Qué hacer tras adoptar a un animal maltratado
Si acabas de adoptar a un animal maltratado y quieres saber cómo tienes que educarlo lo primero que podemos aconsejarte es que seas paciente y que dediques tiempo a su integración en la nueva familia. Superar los traumas es algo difícil y para que pueda tener una vida plena y satisfactoria, el perro o el gato que has adoptado necesita de tu ayuda.
Un perro que ha sufrido malos tratos suele mostrar una actitud reservada, temerosa y desconfiada por lo que tendrás que ser muy insistente y paciente hasta que vuestra convivencia sea normal. Este tipo de animal suele mantenerse en un lugar apartado sin apenas moverse y verás que no se acerca mucho a las personas ni a otros animales pues temen volver a sufrir algún abuso. Necesita confianza y necesita tiempo y ahí estás tú para darle ese consuelo que necesita.
Ayúdale a base de mucho amor. No le grites ante su agresividad ni sus ladridos. Es su manera de expresar su miedo. Siéntate a su lado en el suelo, cada día, hasta que un día él se echará sobre ti y confiará plenamente. Los primeros meses construye un mundo entorno a vosotros dos y tomaros ambos vuestro tiempo.
Igual que las personas nos rompemos psíquicamente a veces, los animales también. Todos necesitamos nuestro tiempo para recomponernos y todos necesitamos ayuda.
Recuerda que la gracia de todo esto es darle una segunda oportunidad a un ser indefenso que no ha hecho nada malo para ser abandonado ni mucho menos maltratado. Acogiendo de corazón y con sensatez un perro o un gato en casa te aseguras que tendrá el cariño, atención, cuidados, higiene e incluso un espacio propio en el que vivir y ser feliz. Y lo mejor, liberas espacio en el refugio o protectora, que seguramente está más que saturada y no siempre puede brindar todos los cuidados que quisieran. Es decir, indirectamente estarás colaborando a que el resto de perros o gatos de la asociación que elijas puedan recibir una mejor atención.
¿Te hemos convencido ya? No vas a arrepentirte. Echa un buen vistazo a la sección de la web para encontrar una mascota para incluirla en tu familia. ¡Queremos muchos finales felices en este 2023!